La Misión por el Amor de Dios en Todo el Mundo, es una Asociación Privada de Fieles por decreto de la Iglesia Católica, conformada por laicos comprometidos y clero que, movidos por el estado actual del mundo, promueven la concientización y reconocimiento de nuestra dignidad de hijos de Dios para ayudar a ponerle fin al silencio, apatía y complacencia que envuelve al mundo en estos tiempos. Su objetivo es restaurar la conciencia de que Dios Padre debe ser el centro de nuestra vida diaria para dar cumplimiento al primer mandamiento: “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu mente y con toda tu alma”, y en consecuencia “a tu prójimo como a ti mismo”.

Su carisma se basa en Cuatro Piedras Angulares: Consagración a Dios a través del Sagrado Corazón de Jesús y del Doloroso e Inmaculado Corazón de María, Conversión Personal (Metanoia), la Oración desde el Corazón y las Buenas Obras.

Los ministerios singulares de la Misión se dirigen a los líderes políticos, funcionarios de gobierno, legisladores y el poder judicial de naciones, así como a líderes de negocios, y a las fuerzas civiles y militares de una nación.